Era una noche como cualquier otra, me sentía ligeramente
relajada cuando me deje llevar por mis pensamientos y más tarde por mis sueños,
Estaba segura de que estaba soñando en un 99.9% yo sabía que aquel hermoso ser
que tenía frente a mis ojos era sólo un sueño, pues hacía meses que no lo veía,
y esa gracia infinita con la que lo recordaba no le hacía justicia, yo podría
pasar años sin verlo, pero al volver a mirarlo a los ojos sabría sin duda que
era él, así hubiese cambiado físicamente a pesar de los años, aunque sólo
habían pasado unos cuantos meses desde que lo había visto por última ves, en mi
sueño , estábamos en una playa sin fin, de esas que no tienen rocas, sólo
palmeras con sombras donde termina la arena , y un sinfín de kilómetros de pura
playa, Estábamos sentados en la arena y el jugueteaba cariñosamente con mis
dedos, yo sabía que era un sueño del cual no quería despertar, él me miraba a
los ojos y yo a él, Era como si hubiesen pasado años desde que en nuestra
adolescencia fuimos novios, él conservaba ese hermoso brillo en sus ojos cafés,
tenía su cabello como lo recordaba , castaño oscuro ligeramente rizado y liso,
sus labios seguían siendo llenos , o por lo menos el inferior , siempre me
había mirado de esa manera tan protectora, que jamás desaparecía, Era como un
dejavú aunque yo no fuera adivina para saber que ese era mi futuro , aunque
había tenido dejavúes que anteriormente se habían cumplido, me negaba a creer
que ese ángel que tenía antes mis ojos lo hubiese vuelto a ver en mi vida
adulta, y más aún que el correspondiera a mi amor como algún día lo había
amado, aunque eso fuera imposible en la adolescencia,si bien dicen que el
primer amor nunca se olvida esa era una manera de comprobarlo, Me sentía
estúpidamente molesta conmigo misma al dejar que mi imaginación llegara a esos
limites , permitiéndome esperanzas erróneas, cuando yo sabía muy bien que el
seguía su camino y yo el mío. No estaba segura del sueño 2 horas después de
haberme despertado, pero había 2 cosas de las que sí estaba completamente
segura,
Yo no podía dejar que mi imaginación siguiera haciendo de
las suyas con mi subconsciente, aunque yo no tuviera la culpa de aquello, el
mismo me traicionaba, trayéndolo a mis pensamientos de nuevo, aunque en sueños
fuera posible,
Y segundo. Yo jamás podría negarle ese derecho que le correspondía,
me odiaba a mi misma de pensar en quitarle ese derecho y bueno , seguir como
seguía hasta ahora, con mi vida, con mis sueños, excluyéndolo a él de todo,
sabiendo que más nunca en mi vida, Adulta claro, lo volvería a ver.
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